En muchas organizaciones, el firefighting (O apagafuegos) pareciera ser la norma. Resolver crisis tras crisis sin detenernos a reflexionar sobre cómo evitar que sucedan en primer lugar.

He trabajado en muchas empresas donde esta "cultura de la reacción" parece inevitable. Se celebra a los héroes que se la pasan apagando fuegos, y rara vez se reconoce a los que los previenen

El problema con esto es que sólo genera parches temporales, problemas que se repiten una y otra vez y, lo más grave, una falsa sensación de productividad. Cada vez que postergamos la solución de fondo, estamos perdiendo tiempo, dinero y energía. Pero lo peor es que afecta la moral de los equipos. La gente se cansa, se quema y terminan odiando hacer cosas que antes los apasionaban.

Hace ya varios años, en una de las organizaciones donde trabajé, la dinámica era simple: Sólo se reaccionaba ante los fuegos. El equipo de desarrollo estaba siempre ocupado intentando resolver urgencias, mientras que los proyectos estratégicos se acumulaban y acumulaban. El día a día era un mar de juntas para definir "cómo salir del problema". La frustración era el pan de cada día y los recursos, siempre limitados. Este caos nos hacía sentir productivos, aunqe la verdad era que no estábamos construyendo nada sostenible.

Fue ahí cuando encontré este artículo de Roger Bohn, "Stop Fighting Fires". En ese momento me ayudó a entender que no se trata de trabajar más, sino de trabajar mejor. Identificar causas raíz, planificar con antelación y cambiar la cultura organizacional son los primeros pasos para salir de este ciclo tóxico.

Y es que, cuando empiezas a identificar qué genera estos incendios, te das cuenta de que muchos podrían haberse prevenido con procesos simples: un análisis de riesgos, reuniones más enfocadas o nomás detenerse a escuchar al equipo antes de tomar decisiones aceleradas. No es que se puedan evitar todas las crisis, pero sí se puede reducir la frecuencia y su impacto.

Hoy estoy un convencido de que prevenir incendios es más valioso que apagarlos. ¿Por qué? Porque previniéndolos se está construyendo algo más grande: Equipos u organizaciones que puede adaptarse y crecer libremente.

¿Qué opinan? ¿Cómo han enfrentado ustedes el este fenómeno en sus equipos? ¿Y cuáles han sido las estrategias que mejor les han funcionado romper el ciclo?

Originally published on LinkedIn, March 13, 2025